¿Lo que siempre soñé o lo que nunca imaginé?
En el momento en que la conexión gira en torno de lo puramente deseo visual junto con la química instantánea, el idilio tiende a volverse efímero. Ridículamente fugaz. Igualito que los hornos del hotel, que simplemente suben de temperatura en un pestañeo, aunque dejan de servir al poco tiempo. Empezar una relación apoyado en lo superficial,